Hoy Domingo, parte de la flota de Barcelona (unos 10 laser) hemos estado navegando, envueltos de sol, viento y un mar agradecido. Por la noche , sobre el sofá, con el cuerpo dolorido y cansado, escuchaba a trompicones un programa sobre Picasso y su relación con Barcelona. Escuché entonces sobre la simpatía que Picasso tenía sobre el poeta Joan Maragall, y del entusiasmo que le producía uno de sus poemas, del poemario ENLLÀ, lo recitaron; me encantó y me recordó a Calella, que será de aquí a dos semanas.
Entiendo en cierta manera, que los master somos un poco poetas, escribiendo sobre el agua con el láser como pluma, versos de libertad, de entusiasmo, de amistad, de alegría y de aventura.
Por eso me doy la licencia de dejaros esos otros versos eternos de Maragall (V estrofa de Vistes al mar, del poemario ENLLÀ), no como los nuestros que se deshacen en la espuma del mar y la cerveza. No los traduzco, porque son fácilmente entendibles para los que no hablen, ni entiendan catalán.
Una a una, com verges a la dansa,
entren lliscant les barques en el mar;
s'obre la vela com una ala al sol,
i per camins que només ells veuen
s'allunyen mar endintre...
Oh cel blau! Oh mar blau, platja deserta,
groga de sol! De prop el mar te canta,
mentres tu esperes el retorn magnífic,
a sol ponent, de la primera barca,
que sortirà el mar tota olorosa.
SI cambiamos "olorosa", por "joiosa" (gozosa), las barcas de pesca, bien podríamos ser los láser.
Alfredo Vázquez
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